Los actos inaugurales de los Juegos Olímpicos siempre son una fiesta, tanto en el terreno como en las gradas, pero en el Estadio Olímpico de Tokio hubo una excepción.
A pesar que en la televisión se percibía una sensación que el recinto estaba abarrotado de gente, era solo una ilusión óptica, debido a que los asientos fueron tapizados.
El objetivo era que se viera que había un ambiente de fiesta en el estadio olímpico, cuando la realidad era otra, debido a las restricciones por el Covid-19.
Solo 1000 espectadores ingresaron al estadio olímpico
El Comité Organizador de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, solamente dejaron ingresar 1000 aficionados, para la ceremonia inaugural,en el estadio de la capital nipona.
De esos 1000 fanáticos que pudieron presenciar el evento en primera fila, , 800 eran invitados extranjeros y 150 de Japón, informó TV Asahi.
Hasta último momento se desconocía como sería el acto inaugural, debido a la incertidumbre que generó los casos de Covid-19 que se dieron en la Villa Olímpica.
Las delegaciones que ingresaron al recinto deportivo durante el desfile, lo hicieron con tapabocas, y con una representación reducida, debido a las limitaciones impuestas.
The #Tokyo2020 Olympics stadium looks full of people, but it isn't. Here's why: https://t.co/kMx2KjwYRI pic.twitter.com/u8mdIXxjlI
— CNN (@CNN) July 23, 2021
Se le rindió tributo a la victimas del virus
Durante el acto inaugural que se llevó a cabo este viernes, se pidió un momento de silencio para recordar a las víctimas mundiales de la pandemia Covid-19.
Se le pidió a los pocos asistentes que asistieron al acto que se pusieran de pie y le rindieran honores aquellas personas que no pudieron sobrevivir al virus, que ocasionó un gran caos en el 2020.
Los organizadores de la justa olímpica que comenzó de manera formal este viernes, anunciaron que las competiciones se harán a puerta cerrada para evitar contagios.
En los últimos días Japón ha tenido un ascenso de casos positivos, por lo que se tuvieron que extremar las medidas de bioseguridad para evitar una nueva suspensión de la cita olímpica.