Mike Pence, vicepresidente de los Estados Unidos, hará una parada el sur de Florida el lunes para marcar el comienzo de los ensayos clínicos para una posible vacuna contra el coronavirus en la Universidad de Miami.
Por redacción MiaiDiario
Pence participará en una mesa redonda con líderes escolares y miembros de la Escuela de Medicina de Miller junto con investigadores sobre lo que podría ayudar en la batalla en curso contra la pandemia.
Como participante de los Institutos Nacionales de Salud COVID-19 Red de Ensayos de Prevención después de su 16 de de julio de ª selección, los planes de la escuela para inscribir a 1.000 voluntarios en el sur de Florida en un ensayo clínico espera que comiencen en el verano.
“La pandemia de COVID-19 está teniendo un tremendo impacto en el sur de Florida y en todo el mundo”, dijo la Dra. Susanne Doblecki-Lewis, experta en enfermedades infecciosas de la Universidad de Miami, quien liderará la iniciativa. “Estamos probando vacunas con el objetivo de encontrar una forma segura y efectiva de detener la propagación del virus”.
Los ensayos clínicos probarán una vacuna desarrollada por científicos del Instituto Nacional de Salud y sus colaboradores en la empresa de biotecnología ModernaTX Inc.
Los posibles voluntarios para el estudio deberán tener al menos 18 años de edad. Un comunicado de prensa dijo que la escuela planea utilizar el alcance comunitario y las operaciones móviles para reclutar de una amplia variedad de datos demográficos.
“Nos comprometemos a involucrar a las personas que representan el rango de residentes afectados por COVID-19 en el sur de Florida por género, edad, raza y etnia, así como a aquellos que están particularmente en riesgo debido a afecciones médicas”, dijo Doblecki- Luis. “Así es como ayudaremos a garantizar que cualquier vacuna que se desarrolle sea relevante para aquellos que podrían beneficiarse más de ella”.
A los participantes se les paga por su tiempo e inconvenientes durante lo que está programado para ser un estudio de tres meses.
“No es para las personas infectadas. Es para las personas en riesgo”, dijo Alcaide.
Los participantes no se infectarán intencionalmente con la enfermedad, sino que se controlarán para ver si la vacuna hace que produzcan anticuerpos que contrarrestan el virus y previenen COVID-19, la enfermedad causada por el virus.
Además de ser un punto caliente, la diversidad racial y ética del área lo convierte en un escenario atractivo para el estudio. Elalcaide señaló que la enfermedad afecta desproporcionadamente a las minorías de manera negativa.
“Realmente queremos llegar a todas las comunidades que están en riesgo”, dijo, y señaló que “en realidad hoy en día todo el mundo está en Miami”.
El veredicto final sobre esta vacuna y otras solo llegará después de meses de más pruebas, pero el alcaide dijo que “es demasiado pronto para saberlo. Es prometedor y realmente esperamos que funcione”.
Con información de NBC Miami
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